No siempre que un@ cree que es víctima de un mal de ojo está en lo cierto. Los efectos del mal de ojo son variados, pero hay que señalar especialmente la sensación de malestar, tristeza, falta de sueño, debilidad muscular, pérdida de concentración, malhumor, depresión, etc. Pero, repito, no significa que padecer estos síntomas se deban a que estés sufriendo mal de ojo.
Lo primero que debes hacer es visitar a tu médico de cabecera y buscar el origen de tus problemas y, si realmente, no hay causa física alguna y tampoco hay razones de naturaleza psicológica, sentimental o afectiva, sólo entonces, puedes empezar a sospechar que hay alguna influencia negativa que te pueda estar afectando.
A veces, podemos sentirnos afectad@s por por la presencia de personas que emiten energías que no son compatibles con las nuestras y podemos sentir cierto desasosiego. Sin embargo, no significa que haya mala intención por parte de nadie.
Se dice que el mal de ojo y las desgracias las producen las personas codiciosas y envidiosas. Evidentemente, la envidia es poderosa y se cuenta como una de las peores vibraciones existentes. Si bien es verdad que las vibraciones mentales negativas pueden afectar a distancia, también podemos protegernos de ellas. Para ello debes mantenerse san@ a nivel físico y mental.
Es practicamente imposible dañar a una persona sana, fuerte y feliz. Su energía no presenta fisuras y, por tanto, es como si tuviera un escudo que repeliese cualquie ataque o vibración negativa. Entonces, los malos deseos o las bajas intenciones se vuelven en contra del individuo o individuos que las proyectaron causándoles el daño que ell@s deseaban ejercer. Y además por triplicado.
En todo caso es muy sencillo saber si eres víctima de algún trabajo negativo.
Coge un plato de cristal hondo. Llénalo de agua hasta casi el borde. Por otra parte, enciende una mariposa (corcho con mecha que flota sobre el aceite de un pequeño recipiente para alumbrar a una imagen) sobre aceite de oliva en un recipiente pequeño.
Posteriormente, coloca el plato encima de la cabeza de la persona que se sospecha haya sido víctima del mal de ojo. Deberá mojar el dedo índice de la mano derecha en un poco del aceite de oliva en el que flota la mariposa de corcho. Deja caer tres gotas de ese aceite en el plato. Si estas se depositan en la zona central del plato sin hundirse ni dividirse en gotas más pequeñas, la persona es libre de malas influencias.
En el caso de que las gotas se vayan hacia los lados del plato, rompiéndose en gotas más pequeñas y hundiéndose, sí existe mal de ojo o alguien está realizando un trabajo negativo en contra de esa persona.
Espero que os sea útil esta información y que la Diosa nos proteja y nos ilumine a tod@s !!!
***Bibliografía:
- "Recetario de auténtica Magia Blanca". Lynda Morris. Editorial Open Project.
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